VII Encuentro Nacional

Organización y colaboradores del VII Encuentro Nacional.

Bernardo Soria
Carlos Delgado
Chimo Sánchez
Cosme Botía
David Martínez
Elvira Olmos (Alzira)
Enrique Olaso

Ildefonso Cumplido
J. José Escribá
J. Luis Alcañiz
J. Manuel Navas
José Meneses
Juan Cardoso
Julio Gramaje

Miguel Pons
Miquel Navarro
Paco Pepe Jordá
Pedro Poch
Manuel Viaño (Intendencia uniformes)
Cava Martiesquius

Programa.

Asistentes.

Total

  • Total Asistentes: 323
  • Saharianos: 161
  • Simpatizantes: 12

Por Destinos

  • Agrupación Tropas Nómadas: 33
  • Artillería: 21
  • Automóviles: 10
  • Aviación: 1
  • BriPac: 2
  • Cía de Mar: 1
  • Infantería: 17
  • Ingenieros: 18
  • Intendencia: 14
  • La Legión: 6
  • Policía Territorial: 22
  • Sanidad: 5
  • Sin Datos: 11

Por Provincias

  • Andalucía: Sin Datos
  • Aragón: Sin Datos
  • Asturias: Sin Datos
  • Baleares: Sin Datos
  • Canarias: Sin Datos
  • Cantabria: Sin Datos
  • Castilla La Mancha: Sin Datos
  • Castilla León: Sin Datos
  • Catalunya: Sin Datos
  • Ceuta: Sin Datos
  • Euskadi: Sin Datos
  • Extremadura: Sin Datos
  • Galicia: Sin Datos
  • La Rioja: Sin Datos
  • Madrid: Sin Datos
  • Melilla: Sin Datos
  • Murcia: Sin Datos
  • Navarra: Sin Datos
  • Valencia: Sin Datos

Álbumes de fotos.

Breve reseña de un Encuentro (El Diablo Cojuelo).

He dejado pasar unos días para poder reflexionar, sobre lo vivido en el VII Encuentro Nacional de Veteranos del Sahara celebrado en la bella ciudad de Valencia, de la que he sido nombrado “hijo adoptivo” por mi esfuerzo en entonar su bello himno regional.
Como a todos los encuentros anteriores, he encaminado mis pasos con mi petate lleno de ilusión, la de volver a contactar con compañeros y amigos, conseguidos y reafirmados en los ya largos años que llevamos cabalgando por nuestra querida página sahara-mili, pero esta vez mi ilusión era aún mayor si cabe, ya que después de cuarenta y tres años me iba a reencontrar con el que otrora fuera mi Capitán en los lejanos días del BIR, el Coronel Don José Guasch Cañas. Entrañable fue en momento de nuestro encuentro, bajo la mirada entre sorprendida y comprensiva tanto de mi esposa como la de su hijo, ese niño que aparecía en las fotos del día de nuestra Jura de Bandera y que ahora es una especie de Guardia de Corps de su querido padre. No acabaron aquí los momentos entrañables, pues una vez acreditados para la asistencia al Encuentro, la sorpresa llego de mi compañero de armas, Francisco José Jorda (Paco Pepe para los amigos), el cual además de entregarme su ya habitual carta (no olvidemos que fue Cartero en Intendencia), me sorprendió con un obsequio personal del que guardaré para siempre un memorable recuerdo.
Y llegó el momento de los saludos, poco a poco fueron llegando los Veteranos de todos los rincones de España (hasta llegó un Gomero que vino a vino a sustituir, que no a hacer olvidar, al Chicharrero ausente), otra vez las emociones del reencuentro, la constatación de que algo nos une a pesar de lo que nos separa, de que todos somos saharianos y todos somos bienvenidos. De ello se encargaron y a mi entender de una manera eficaz los compañeros valenciano, organizadores esta vez de nuestra reunión. Gran acogida por su parte desarrollando un trabajo impagable del que todos nos beneficiamos. La primera jornada transcurrió entre saludos, recuerdos y emociones y la comprobación de que ellas, nuestras esposas y compañeras son las primeras en integrarse. Rápidamente se formo un pelotón que se desplazo al centro de la Ciudad con la finalidad de asolar comercios mientras nosotros nos quedábamos de guardia en la cantina más próxima para recibir al resto de nuestros compañeros que fueron llegando a lo largo de la mañana. Tras la comida (en la que asolamos un establecimiento de la zona), llegó el correspondiente descanso hasta la hora de recibir a los compañeros que procedentes de Badajoz y Sevilla, llegaban en un autobús fletado al efecto (tal como hicieron los compañeros de Málaga, aunque estos adelantaron su viaje a la medianoche y a primera hora de la mañana ya estaban allí, aunque no pudieran pegar ojo en el camino por mor y culpa de sus ya clásicos alborotadores ¿verdad Juan? Y llegó la hora de la cena y tras la misma la actuación de los compañeros que se ofrecieron para amenizar el espectáculo, Donato, Carím, Sarrión, todos ellos bajo la batuta del Maestro de Ceremonias, el ínclito Pepe Meneses.
El día central del Encuentro lo comenzamos con un desayuno multitudinario en el Hotel (la verdad es que lo teníamos copado y por todas partes de veían individuos vestidos con polos y gorras identificativos de su condición de Veteranos del Sahara).
A la hora acordada todo el mundo a los autocares y tras un breve desplazamiento en el que pudimos disfrutar de la vista del Mare Nostrum, tranquilo y calmado en una mañana apacible y soleada, llegamos hasta la población de El Puig, (que nos explicaron significa altura del terreno, monte pequeño) para efectuar la visita programada al Monasterio y al Museo que alberga en su interior, el de la Imprenta y las Artes Gráficas. Allí a la salida del mismo, fue donde un pelotón de asirocados bajo las ordenes Coronel Guasch, intento un remedo de formación militar que vino a demostrar que los años no pasan en vano y la disciplina y el orden, quedaron atrás hace mucho tiempo, visto lo cual se optó por posar para la fotografía oficial, esta vez en dos escenarios distintos e incluso con la participación inesperada de una novia a punto de subir al altar que acogió con simpatía nuestra “invasión”.
A continuación nos trasladamos hasta las instalaciones donde iba a tener lugar la tradicional Comida de Hermandad, aunque en realidad lo tradicional habían sido cenas, pero esta vez se optó por comida. A la entrada del establecimiento nos vimos obsequiados, como no podía ser menos en Valencia, con una espectacular traca pirotécnica y posteriormente con una serie de bailes regionales interpretados por un grupo folclórico del lugar, mientras degustábamos un aperitivo de bienvenida, tras lo cual accedimos al comedor, un magnifico e incomparable marco para celebrar nuestra reunión. Aquí como siempre ocurre, cada quien se sentó con cada cual y todos juntos, pero no revueltos, dimos cuentas de platos y viandas, todo ello rematado por el exquisito cava que como siempre, nos obsequio el compañero Joan Martínez Esquius, con el que brindamos por todos aquellos que en esta ocasión no nos pudieron acompañar, con mención explícita al compañero Daniel Pastor recientemente fallecido y del que nunca olvidaremos, además de su persona afable y cordial, las famosas peladillas con que nos obsequiaba siempre que tenia ocasión (hasta siempre Daniel). También hemos recibido otro obsequio que ya se está convirtiendo en un clasico unas botellitas de aceite de oliva virgen, facilitadas por el compañero Antonio Domínguez y traídas expresamente desde su feudo en Monterrubio (Badajoz). Tras los postres vino el acto de homenajes y reconocimientos, a Julio Gramaje como el Veterano más longevo, al mantenedor de nuestra página sahara-mili Manuel García “Trampas” y a la que fuera Fallera Mayor allá en el BIR, Mª José Rosillo, tras lo cual vino la imposición de la Medalla del Bir al Coronel Don José Guasch Cañas, por nuestro pseudo-Coronel Carím. Posteriormente el compañero José Rodríguez “el Relaciones”, tuvo el detalle de obsequiar con un carnet especial de Veterano de Honor, a aquellos que han/hemos tenido la suerte de poder asistir a todos y cada uno de los Encuentros Nacionales celebrados hasta la fecha, gracias “Intendente Mayor”. Tras estos actos protocolarios vinieron las fotos de los grupos de Veteranos, Policías Territoriales, Artilleros, Nómadas, Intendentes, etc, etc, cada uno con sus compañeros de Arma o Cuerpo. Y llegó el momento de designar la sede del que será nuestro VIII Encuentro Nacional, para el que las quinielas previas señalaban a tres queridas poblaciones: Málaga, Tenerife y Sevilla. Fue esta última la designada después de que múltiples voces lo solicitaran, siendo refrendada la elección con el aplauso general de los asistentes, comprometiéndose en ese momento los compañeros sevillanos, como un solo hombre, a llevar a cabo la organización del próximo Encuentro. Y como remate final, la música, nuestro Himno de los Veteranos “Las Corsarias”, el pasodoble Valencia y como colofón el himno regional de Valencia, entonado con emoción por los valencianos asistentes y por unos cuantos osados que les acompañamos gustosamente.
De vuelta a casa, al hotel que nos albergaba, otra vez tuvimos la ocasión de celebrar una cena multitudinaria y aprovechar para recrearnos en mil y una fotografía, solos, en grupo, por mesas, por paisanaje, en fin un cumulo de recuerdos para los días venideros. Como la casualidad quiso que ese mismo día se celebraba el Día de la Comunidad Valenciana, tuvimos la ocasión de disfrutar, como colofón a nuestra intensa jornada, de una exhibición de fuegos artificiales como solamente en esta tierra saben ofrecer, impresionante de ruido luz y color, el mejor fin de fiesta que imaginar pudiéramos. De esta forma nos llegó a la mañana siguiente la hora de la partida, las despedidas, las emociones contenidas, el hasta otra, nos llamamos, cuidaros, todo ello pensando en lo poco que nos queda para el próximo. Valencia ha muerto, viva Sevilla. Y dejo para el final los agradecimientos: a los compañeros organizadores, por su ingente labor, por su buen hacer, por su dedicación, por su esfuerzo en complacer a todos y cada uno de los asistentes. Al personal del Hotel, del Restaurante, a los guías del Monasterio, a todos cuantos con su trabajo colaboraron al buen éxito del Encuentro y por encima de todos a nuestras esposas y compañeras sin cuya complicidad no podríamos disfrutar de tan gratos momentos.

Un abrazo y hasta la próxima.
F. J. de la Cuesta / El Diablo Cojuelo

Recuerdos.

Álbum 3.- Recuerdos ofrecidos por la Organización.

Álbum 3.- Detalle a los asistententes a todos los encuentros Nacionales (I al VII).

Álbum 3.- Recuerdos ofrecidos por diversos saharianos.

Reencuentros.

Reencuentro «Cabrerizas» 1973-1974

Reencuentro en Valencia después 45 años.
3 Artilleros.
Salvador Blasco, Rafael tapia y Miguel Henarejos.

Reencuentro en Valencia después 40 años.
Pepe Sanz y Serafín Quintana.