celebrar el II Encuentro Nacional de Veteranos del Sahara, o sea, nosotros.
1º Que no fué una idea mía, sino fruto de un acuerdo para que yo fuera el encargado de recibir las opiniones de los compañeros y recabar llos datos por ellos aportados.
2º Que se trataba de eso, de una Encuesta y como tal solo pretendía conocer las opiniones del colectivo sobre la idea de celebrar un nuevo Encuentro, nunca se dijo que fuera un referendum vinculante.
3º Se trataba de encontrar compañeros que se encargaran de la organización del Encuentro, que los mismos tendrían poder de decisión para establecer el programa y ello incluía el sitio y el tipo de acto, comida, cena ó desayuno, lo que ellos dictaminaran.
Una vez acabada la toma de datos, hice llegar los mismos a los citados Organizadores, y ahí se acabó mi misión.
Solamente es un grupo de voluntarios que se van a encargar de preparar un evento. para que todo el resto del colectivo disfrute de él.Por lo que debemos aplaudir, animar y agradecer a quienes, restando horas a su tiempo libre, se están dedicando a preparar toda la infraestructura y dejarnos de quejas, mensajes y circunloquios.
Un fuerte abrazo, compañeros del alma, compañeros.
Amigo Fernando: Me parecen perfectas tus puntualizaciones y creo que con ellas debiera de acabarse esta especie de enfado múltiple que nos ha dado a todos. Si estamos asirocados aqui tenemos compañeros que nos pueden hacer de excelentes psicólogos, entendiendo con este calificativo al amigo en quien puedes confiar para contarle las penas o para llorarle la curda.
He dicho, en algun otro escrito, que ya peinamos canas y lo que es más, ya no nos queda un pelo de tonto.
¿A estas alturas nos comportaremos como nuestros nietos con sus compis de escuela?
¡Joder tios! (perdonarme el palabro) ¡Si debieramos de avergonzarnos de comportarnos como chafarderas de vecindario! A este paso nos llaman de salsa rosa o de cualquier bodrio parecido.
Pienso que seriamos mucho más sabios si olvidaramos los "tremendos agravios" que nos separan y nos dedicasemos a pensar en lo que nos une. Me alegraria saber que somos inmensamente ricos porqué valoramos aquello que no se puede comprar por más dinero que se posea: la amistad y los recuerdo de una época extraordinaria.
Estoy convencido que con este patrimonio nunca tendremos necesidad de enfado ni de perdón, porqué a los amigos se les ama y nadie se enfada ni necesita perdón o perdonar a alguien a quien quiere.
Es posible que yo sueñe con un mundo ideal, pero es que creo que la amistad está hecha de fidelidad y, si al amor unimos la fidelidad jamás podremos ofender a un amigo, ni este podrá herirnos.
Se muy bien que mi escrito puede parecer cursi y hasta amanerado, por calificarlo con cierta suavidad, pero lo cierto es que nos hemos convertido en personas ricas. De conocer a poca gente hemos pasado a tener mesa puesta en toda España y, en algunos casos hasta vivienda. A esto me refiero; al hecho de que una buena cantidad de gente desconocida, por el hecho de verse representado en el otro, lo reciba en su ciudad y en su casa como a un hermano.
¿Vamos a tirar esto por la borda por un quitame allá esas pajas?
Creo que no, creo que podemos comportarnos como lo que somos y como nos enseñaron nuestros compañeros beduinos. Caballeros del desierto que ofrecemos aún lo que no tenemos a nuestros huespedes, aunque no estemos de acuerdo con ellos.
Me gustaria que no creyerais que es una ducha de moralina este escrito mio, si no una arenga animando e invitando a recrear nuestro buen rollo.
Un abrazo, compañeros Saharianos.
